lunes, noviembre 10, 2008

siempre recuerdo la primera vez
que estire mis cortos labios
para ayudarte a volar lejos
de tus problemas ingratos

adioces congelados en fotos
me cortaron las lágrimas
para que con ellas crearas
este feo cascarón vacío

mi reloj de bolsillo no mide
el tiempo que queda nos sigue
son sólo recuerdos trizados
entre vidrios rotos de ayer

Sé cuanto duele caerse
desde una altura infinita
bailando junto a la luna
el alma se nos derrumba

al vernos en reflejos líquidos
nos engañamos el uno al otro
con caras de rasgos cambiados
en sueños del amor culpable

No hay comentarios.: